Cozumel.- En el marco del Día Mundial de la Tierra, que se conmemora este 22 de abril, la Fundación de Parques y Museos de Cozumel (FPMC) realizó una jornada de limpieza de playas, y actividades con los “Jóvenes por la Conservación”; también recibió en el Parque Urbano Corazón a estudiantes del CONALEP, que conocieron la biodiversidad del sitio.
El Día de la Tierra es una fecha designada por la Organización de las Naciones Unidas (ONU) dedicada al planeta, con el objetivo de concienciar a las personas acerca de la conservación y la sostenibilidad del medio ambiente e implementar medidas urgentes para un futuro más saludable, explicó el director del Centro de Conservación y Educación Ambiental (CCEA), Rafael Chacón Díaz.
Con el apoyo del director general de la FPMC, Alejandro Marchán Payán, se trasladó al voluntariado a Punta Sur para que participaran en la limpieza de playas, donde se recolectaron desechos traídos a las costas por las corrientes marinas que provienen de otros países, o de embarcaciones que navegan por la zona.
Chacón Díaz explicó, que entre los desechos que más se recolectan se encuentran microplásticos, tapas, envases de vidrio, cuerdas, varios artículos de plástico como botellas y envoltorios que no son desechados correctamente y acaban en el mar.
También se realizaron diversas actividades con los integrantes del grupo “Jóvenes por la Conservación”, que ya se están preparando para la organización de la edición número 30 del Congreso Internacional de las Niñas y los Niños por el Medio Ambiente, que se llevará a cabo en junio, cuando se conmemora el Día Mundial del Medio Ambiente.
La FPMC además recibió a estudiantes del CONALEP en el Parque Urbano Corazón, donde conocieron la riqueza natural que existe dentro de la mancha urbana de la Isla, a través de la identificación de flora nativa, observación de aves y la importancia de conservación de los recursos ecosistémicos, con el apoyo del biólogo Adrián Andrés Tun Cano.
Al finalizar el recorrido, las y los alumnos plantaron dos árboles de la región de la especie chicozapote (Manilkara zapota) y se les incentivó a enlistar en la plataforma Naturalista las plantas y animales que observaron, fomentado así la ciencia ciudadana.