Buenos días, señor diputado Hernán Villatoro, presidente de la Comisión Permanente del Segundo Año de Ejercicio Constitucional de la XVI Legislatura del Estado.
Diputado Erick Gustavo Miranda, presidente de la Junta de Gobierno y Coordinación Política, diputadas y diputados de la XVI Legislatura, señores diputados y diputadas federales, señor diputado Jesús Alegre.
Lic. José Antonio León Ruiz Magistrado Presidente del Tribunal de Justicia del Estado, me da mucho gusto saludar diputado constituyente don Sebastián Estrella Pool.
Saludo al General de Brigada don José Luis Vázquez Araiza Comandante de la 34 Zona Militar, doy la bienvenida. Saludo al Vicealmirante José Ricardo Gómez Meillón de la XI Zona Naval.
Me da mucho gusto saludar a las presidentas y presidentes municipales de Bacalar, Benito Juárez, Othón P. Blanco. Saludo a los señores Dignatarios Mayas.
Un gusto saludar a Maritza del Carmen Yeh Chan, galardonada con la distinción de la Medalla al Mérito Indígena Maya Cecilio Chi.
Me da gusto saludar a don Arturo Emiliano Abreu, Coordinador de los Programas de Bienestar del gobierno de México y del Estado.
Saludo a las presidentas y presidentes municipales electos, compañeros y compañeras del gabinete estatal, rectores de las universidades del Estado, participantes de la convocatoria a la Medalla al Mérito Indígena Maya Cecilio Chi y saludo también a todas y a todos los quintanarroenses que nos siguen a través de las redes sociales y los diversos medios de comunicación, a todas y a todos bienvenidos.
Señoras y señores:
Me da mucho gusto acompañarles en esta celebración homenajeando a un gran un líder indígena maya como lo fue Cecilio Chi y continuar su legado y memoria con la entrega de la medalla conmemorativa que lleva su nombre.
Saludo a todas las autoridades que hoy concurren en este acto.
De manera muy particular, saludar a los dignatarios mayas representantes de sus comunidades.
Me enorgullece que Quintana Roo pueda ahora contar con el apoyo de una fiel defensora de los derechos de las mujeres indígenas, promotora de la cultura y lengua maya, como lo es la maestra Maritza del Carmen Yeh Chan a quien felicito con especial consideración en su esfuerzo de fomentar la comprensión y promover la inclusión de los pueblos indígenas.
Mi reconocimiento Maritza y mis felicitaciones por este merecido premio.
Quiero también saludar a las y los legisladores, a quienes les expreso mi reconocimiento por el trabajo en conjunto para impulsar el desarrollo y progreso de Quintana Roo.
Reconozco a todas las fuerzas políticas hoy presentes. A quienes coinciden con el proyecto democrático que hemos impulsado y a quienes tienen diferencias con él.
Pero a todas y a todos, porque posibilitan un espacio que abraza la madurez política que nuestro Estado ha construido en estos años y que muestra cómo más allá de las diferencias, podemos establecer consensos que enriquecen el debate sobre las grandes reformas que necesitamos para el bienestar de todas y todos los habitantes de Quintana Roo.
Amigas y amigos:
Quintana Roo, es un estado que nació precisamente por el pueblo maya.
Hoy es un estado y un pueblo multicultural, significa que está conformado por distintos pueblos, distintas culturas, expresiones, con distintas visiones que nuestra Constitución las ha abrazado para el bienestar de toda la comunidad quintanarroense. Se ha formado un sentimiento que nos enorgullece, proveniente de nuestras raíces, de la inmigración de nuestros estados vecinos y de cientos de miles de extranjeros que llegaron a este Estado a encontrar un modelo para su futuro de vida.
Y es por ello que hoy el Congreso del Estado ha querido honrar y, sobre todo, hacer reconocimiento a nuestros ancestros, a nuestros orígenes, y a los pueblos originarios de nuestra cultura maya. Porque a partir de ese legado, hoy somos el Quintana Roo pujante, en crecimiento, líder del turismo mundial y que no baja los brazos ante cualquier desafío tanto en materia sanitaria como climática.
Ese sentimiento quintanarroense nos pone a prueba todos los días.
Nos lo ha puesto en este difícil año que estamos pasando con la pandemia, los desastres naturales y la necesidad de recuperar nuestra economía y fuentes de trabajo.
El pueblo maya tiene sus propias cosmovisiones, culturas, religiones y lenguas y a pesar de los desafíos a los que nos hemos enfrentado, una de las principales características que hemos heredado de ellos, ha sido la resistencia, resiliencia y perseverancia.
El “Premio Cecilio Chi” que hoy otorgamos representa por una parte el testimonio de la fuerza que tienen los pueblos indígenas y nuestras raíces mayas en nuestro Estado y por el otro, el compromiso que tenemos con ellos, de apoyar y respaldar, con acciones de políticas públicas, para lograr condiciones de mayor bienestar.
En esas acciones, la principal que estamos tratando de combatir de raíz y que constituye uno de los más sufridos rostros de las comunidades, es la pobreza y la marginación.
Y por eso, junto con las comunidades indígenas, hemos venido trabajando desde el primer día de gobierno, para mejorar sus condiciones de vida.
Lo estamos haciendo a partir de un trabajo, en conjunto, que nos permita construir y contar con un Quintana Roo más inclusivo, igualitario, solidario y participativo. Porque la atención a los pueblos indígenas, como a la población de todo Quintana Roo, no puede hacerse sólo desde algunos espacios, es una tarea transversal; es decir, es una tarea en donde todas las dependencias tienen responsabilidad y hay objetivos que alcanzar.
Permítanme compartirles algunas de estas acciones que se han llevado a cabo, quizá emblemáticas, en dónde estamos apoyando a los pueblos indígenas, buscando en todo momento coadyuvar todos los esfuerzos con la capacidad creativa, imaginativa, de nuestros indígenas que merece tener respaldo y apoyo para poner en marcha esos proyectos.
Hoy el 90 por ciento de las zonas rurales del Estado tienen agua potable.
A través del programa Dignificación de localidades en las comunidades de los municipios de Bacalar, Lázaro Cárdenas, Felipe Carrillo Puerto, José María Morelos, Tulum y Othón P. Blanco, tienen obras que incluyen la construcción de módulos comunitarios, modernización del servicio de alumbrado público, infraestructura de apoyo para personas con discapacidad y el mejoramiento de espacios deportivos y parques.
Para beneficiar a su economía social se establecieron programas de Huertos Familiares, Permacultura y Banca Social, así como también estufas ecológicas, pisos firmes logrando índices de disminución de la pobreza.
Se dio acceso digital en buena parte de la zona rural al trabajar en la infraestructura que otorga señal telefónica e internet.
Se está trabajando en la infraestructura para otorgar conexión de telefonía celular en la extensión de 30 km entre Tulum y Felipe Carrillo Puerto.
Se abrieron caminos saca cosechas que les permite a las comunidades poder comercializar sus productos acortando el tiempo y distancia.
Todos los centros de salud de las comunidades del Estado se reconstruyeron y certificaron para otorgar mejor servicio a sus pobladores.
Hemos llevado la educación a todas y todos ellos buscando suficientes escuelas, aulas, maestros y maestras y en breve una Universidad en Tulum.
En materia de justicia para las mujeres indígenas se avanza contra la impunidad y se detiene y enjuicia a quienes las agreden.
Se brinda apoyo permanente a la infraestructura de los centros ceremoniales e iglesias mayas, así como el apoyo a los Dignatarios Mayas.
Esta es una pequeña muestra del compromiso permanente que tenemos en la administración para apoyar a los pueblos indígenas, porque Quintana Roo y nuestros pueblos han de ser nuestra herencia y no nuestra indiferencia.
Queremos ser un gobierno aliado, que les reconoce sus espacios, su legado, que respeta sus tradiciones y que apoya las tareas para que tengan mejores condiciones de vida.
El punto de encuentro en esta tarea será siempre esa cosmovisión conjunta que nos dirá qué hacer y cómo hacerlo con el máximo respeto a sus tradiciones, usos y costumbres, para que puedan tener mejores condiciones y mayor calidad de vida.
Señoras y señores:
Hace 5 años propusimos un cambio para impulsar una forma diferente a lo que se había hecho en el Estado. Esto quizá no se explique con palabras, sino con reformas y estilos de conducción que son de carácter estructural.
Y estas acciones se van acreditando con el tiempo.
En materia financiera hicimos los que teníamos que hacer para asegurar que los quintanarroenses pudieran respirar de la asfixiante deuda heredada.
Establecimos las bases para que la transparencia se convirtiera en una bandera de nuestra gestión, enterrando la impunidad y el latrocinio que existía.
Hicimos una reestructuración administrativa para asegurar que el Estado no derrochara sus recursos y que tuviese mayores posibilidades de invertir en educación, en salud, en la zona rural, en mejorar la infraestructura de la zona sur que tanto tiempo fue abandonada.
Impulsamos una forma de gobernar en donde la potestad política no pasa por una sola persona o una sola corriente partidaria y abrimos las puertas al juego democrático como jamás se había visto en nuestro Estado, aunque para algunos se llamen derrotas que poca visión de la realidad.
Conducimos con responsabilidad y liderazgo una pandemia que nos cerró de la mañana a la noche, las puertas de todos los ingresos que percibimos por el turismo y podemos decir con especial orgullo que, a pesar que esto no ha terminado, la recuperación económica está en marcha dando frutos y resultados.
En definitiva, nos propusimos acabar con la impunidad y hacer un gobierno decente.
Yo estoy convencido del camino trazado y, por ello, expreso mi reconocimiento y felicitación a quienes comparten esta visión de no bajar los brazos, de trabajar civilizadamente entre todos para lograr, desde cualquier trinchera o espacio político, lo que sentimos en nuestros corazones que es el profundo amor a Quintana Roo, a nuestros orígenes y a lo que somos.
Esta visión y esta convicción nos invitan a ver con optimismo que estos cambios que se han ido produciendo, nos permitirán tener una mejor plataforma para crecer en el futuro, para impulsar el dinamismo económico que nuestro Estado necesita, para afianzar nuestro liderazgo turístico y para consolidar más y mejores oportunidades.
Por mi parte, ante las y los legisladores del Estado, ante los Dignatarios Mayas reitero mi compromiso de ser el más firme aliado que habrán de tener para acompañarles siempre en este esfuerzo compartido.
Felicidades Maritza, y mi mayor reconocimiento a la memoria de lo que significa para Quintana Roo el legado y el espíritu de Cecilio Chi.
Muchas gracias.