Felipe Carrillo Puerto, Quintana Roo, 27 de octubre de 2019
Buenos días, con el gusto de saludarles y de estar aquí en Felipe Carrillo Puerto.
Siempre es un gusto venir, verles, saludarles… Me da mucho gusto compartir con ustedes estas reuniones, estos eventos y más con el tema de nuestra cultura maya, de los diferentes pueblos vivientes, de los pueblos indígenas que tanto necesitamos y donde debemos trabajar mucho más.
Me da mucho gusto saludar a don Simón Caamal, presidente del gran Consejo Maya y saludar también a los generales, sacerdotes, el juez tradicional y los dignatarios mayas que me acompañan. Me da mucho gusto verlos y saludarles.
Saludo al señor presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto don José Esquivel. Gracias, Pepe, por recibirnos aquí; gracias al diputado Pedro Pérez, presidente de la Comisión de Asuntos Indígenas de la Décima Sexta Legislatura del Congreso del Estado; a don Francisco Javier Reyes, magistrado representante del Tribunal Superior de Justicia, a Delta, mucho gusto saludarte directora general del Instituto para el Desarrollo del Pueblo Maya, y a don Francisco Javier Rosado May, encargado de la Oficina de Representación del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas en Quintana Roo.
Me da gusto saludar a don Víctor Maas, presidente municipal de Tulum. Bienvenido, Víctor
Muchas gracias por recibirnos Diego Ramón Briceño, director del Instituto Tecnológico de Felipe Carrillo Puerto. Me da mucho gusto venir aquí al tecnológico, escuchar y ver muchos de los avances que se han logrado y se han alcanzado en este muy importante instituto, donde hemos tenido muy buenos resultados, donde hemos tenido muchísimas opciones y posibilidades de crecimiento de desarrollo que nos han representado a nivel nacional y a nivel mundial. Eso nos da mucho gusto.
Felicidades por el trabajo. Hay que seguir poniéndole ganas, atención y buenos esquemas que nos permitan seguir creciendo y avanzando. Muchas gracias por recibirnos, señor director.
Me da gusto saludar a don Luis Alegre, diputado federal por Quintana Roo. Saludo a mis compañeros del gabinete, a don Manuel Alamilla, oficial mayor de Gobierno, y al inspector Marco Antonio Mejía Juárez, titular de la Estación de la Policía Federal de Felipe Carrillo Puerto.
Saludo a los regidores del honorable Ayuntamiento de Felipe Carrillo Puerto. Me dijo el presidente municipal que yo los salude de su parte también. Saludo a los señores regidores, es en serio, no se rían. Al síndico también y a la síndica me da gusto también saludarles, y a los amigos de los medios de comunicación.
Señores y señoras, les decía que es muy importante tener este encuentro, este tipo de encuentros en el que en varias mesas de trabajo se estarán discutiendo, debatiendo y exponiendo ideas, y escuchando también ideas de quienes hoy tienen la opción y la posibilidad de buscar el mejor desarrollo de nuestros pueblos indígenas, de quienes tienen la parte importante de saber y vivir todos los días esta parte de nuestra sociedad y que seguramente podrán aportar mucho a los comentarios, en la búsqueda del desarrollo de nuestra cultura maya y de nuestros pueblos.
Mientras tengamos la oportunidad de oír esas experiencias y de hablar, de tener argumentos suficientes que nos permitan mejorar la legislación y mejorar la búsqueda de más derechos hacia todos nuestros hermanos mayas, tendremos entonces una seguridad y una certeza de que Quintana Roo puede avanzar mejor.
Sin duda, la cultura maya es parte fundamental del desarrollo y el crecimiento del estado, de lo que hoy tenemos como historia. Gran parte de nuestra población maya vive, trabaja y se desarrolla precisamente en nuestros pueblos, dando mucho de sus conocimientos, de sus experiencias y de sus esfuerzos en bien del desarrollo del estado.
Este año de 2019 ha sido denominado por la Organización de las Naciones Unidas como el “Año Internacional de la Lengua Indígena”, y este justo reconocimiento nos permite reafirmar nuestro compromiso con nuestros valores y nuestras tradiciones representados por nuestros dignatarios y pueblos mayas.
Muchos pueblos construyen su identidad alrededor de la idea que tienen del origen de la humanidad. En estos 45 años de vida constitucional, Quintana Roo ha experimentado niveles desarrollo y crecimiento que lideran muchas de las estadísticas del país, a partir de un liderazgo turístico y una tasa de empleo por arriba de la media nacional.
Sin embargo, las desigualdades y las brechas existentes que padecemos, sobre todo en las zonas indígenas, no se pueden solucionar solamente con un deseo de buena voluntad.
Hay que sumar esfuerzos y trabajar todos juntos a partir de un proyecto colectivo, que fije un rumbo hacia un futuro, con la mira puesta en un Quintana Roo incluyente, participativo y solidario, que viva en torno a nuestros valores ancestrales y a nuestras tradiciones.
Ése fue el espíritu que forjaron nuestros antepasados, quienes fueron midiendo, con la objetividad de los tiempos, cada paso que se necesitaba para avanzar y el camino también de lo que nos falta por recorrer.
Hoy, esos tiempos nos reclaman para hacer justicia: justicia social, justicia en el respeto a los derechos humanos y a nuestra cultura milenaria, justicia en la equidad de género. Se nos reclama, con urgencia, posar nuestra mirada sobre el futuro.
Sea este congreso una invitación amplia para que lo que nos falta por hacer lo hagamos juntos, coordinando esfuerzos y poniendo imaginación para enfrentar y vencer cualquier reto que nos depare.
Necesitamos generar buenas condiciones para que nuestra gente viva con bienestar y es allí donde debemos fortalecer el verdadero sentido del quintanarroismo.
Señoras y señores, amigos dignatarios mayas, Quintana Roo ha avanzado mucho en 45 años, pero también tenemos una obligación y un gran reto: mirar hacia el futuro con ambición y compromiso.
Sigamos el ejemplo de aquellas generaciones de generales que dieron origen a la guerra social maya o Guerra de Castas, a mediados del siglo XIX, y tomemos decisiones valerosas para seguir adelante.
Renovemos el pacto de concordia que nos identifica como quintanarroenses. Éste es el momento. No hay tiempo que perder. Firmemos un nuevo pacto social que nos una, que nos mueva y que nos dé confianza.
Somos un gran estado. Tenemos todo para consolidarlo día tras día. Sigamos trabajando con pasión, con dedicación. Hagamos que el norte, el centro y el sur de nuestro estado se reencuentren en el objetivo común del crecimiento y el desarrollo.
Tenemos la fuerza, tenemos el coraje y tenemos el sentimiento y la certeza de que en este legado constitucional, que heredamos con toda la responsabilidad de nuestro tiempo, hay que encontrar más y mejores oportunidades para todos.
En momentos complicados en materia económica y en materia financiera, tenemos que ser creativos, debemos buscar todos juntos la mejor manera de encontrar el financiamiento que nos permita seguir avanzando en el desarrollo de nuestros pueblos, en el apoyo a la mejora de la infraestructura de cada uno de ellos, en la búsqueda también de nuevas oportunidades de trabajo y de desarrollo económico, de autonomía para el trabajo de las mujeres y de independencia económica para ellas en cada uno de los diferentes pueblos, y que eso nos permita juntos avanzar de una manera mucho más ordenada y con mucho más fortalezas, para entonces ser una sociedad mucho más igualitaria que trabaje por el bien de nuestras familias y de todo nuestro estado.
Muchas gracias, que tengan mucho éxito en el congreso.