-La comunidad puede llamar al Centro de Conservación y Educación Ambiental para pedir apoyo y atender animales
Cozumel.- El equipo de la Fundación de Parques y Museos de Cozumel (FPMC) rescató recientemente a una cría de cocodrilo (Crocodylus acutus) y una zarigüeya (Didelphis marsupialis), ambos ejemplares de fauna silvestre que se encontraban en zonas urbanas. Tras una revisión exhaustiva por parte de especialistas de la Dirección de Conservación y Educación Ambiental (CEA), se constató que los animales estaban en buenas condiciones, lo que permitió su pronta liberación en su hábitat natural.
Este tipo de acciones están alineadas con la visión de la gobernadora Mara Lezama Espinosa, quien impulsa la participación comunitaria en la protección del medio ambiente a través del Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo. En este acuerdo, se promueve un enfoque de corresponsabilidad donde la población es un actor clave en la conservación de la biodiversidad, la Gobernadora ha destacado que el cuidado del entorno es una prioridad que se debe abordar en conjunto, con especial énfasis en la fauna nativa de la región.
Rafael Chacón Díaz, director del CEA, explicó que la cría de cocodrilo fue encontrada cerca de la carretera, a la altura del Parque Natural Chankanaab, situación que ha ocurrido anteriormente, con el riesgo de atropellos para los reptiles. Gracias a los reportes ciudadanos, se evitó una tragedia y se pudo actuar a tiempo para asegurar el bienestar del espécimen. Este tipo de colaboración entre la comunidad y las autoridades es esencial para proteger a las especies locales.
En el caso de la zarigüeya, Chacón Díaz detalló, que probablemente ingresó a la zona urbana en busca de alimento. Este tipo de encuentros con la fauna silvestre se han vuelto cada vez más frecuentes, lo que refuerza la importancia de la educación ambiental y la pronta acción por parte de la ciudadanía para evitar situaciones de riesgo tanto para los animales como para las personas.
Para finalizar, hizo un llamado a la comunidad para que también tengan cuidado con las aves que suelen estrellarse en los cristales, por lo que instó a la colocación de calcomanías para que la avifauna pueda detectar la presencia de los cristales y en caso de lesiones se pongan en contacto con los biólogos del Centro de Conservación y Educación Ambiental (CCEA), al número telefónico 987 112 97 91.