-Se genera información científica que servirá de referencia para posteriores observaciones de avifauna
Cozumel.- La Fundación de Parques y Museos de Cozumel (FPMC) continúa fortaleciendo su compromiso con la investigación científica y la participación comunitaria al documentar un caso inusual de pigmentación en un ave de la especie Zanate Mayor (Quiscalus mexicanus), registrado gracias al programa de observación de aves urbanas que impulsa la ciencia ciudadana en la isla.
Desde hace años, la FPMC desarrolla trabajo de campo que ha permitido generar información valiosa sobre la biodiversidad local, involucrando activamente a niñas, niños, jóvenes y personas adultas en acciones que fortalecen la cultura ambiental en Cozumel.
Como parte de las acciones de monitoreo de avifauna, recientemente se obtuvo el primer registro en la isla de una hembra de Zanate Mayor con aberración cromática tipo “marrón”, una condición poco común ocasionada por una mutación genética.
Esta alteración provoca que el plumaje, normalmente café en las hembras, adquiera tono marrón muy claro o crema debido a su sensibilidad a la luz solar. Aunque el color del ojo permanece amarillo, el pico y las patas se observan ligeramente más claros de lo habitual.
El Zanate Mayor, conocido localmente como X’kau, es una de las especies de aves más abundantes en Cozumel por su notable capacidad de adaptación, sin embargo, casos como este suelen generar confusión incluso entre especialistas, ya que dificultan la correcta identificación de ejemplares silvestres.
Pese a que en la última década ha aumentado la disponibilidad de información gracias a nuevas tecnologías, aún existe una brecha importante en el estudio de las anomalías cromáticas en la Península de Yucatán.
El registro fue recientemente publicado por Paulina Sabido Villanueva, manejadora de recursos naturales, y el biólogo Héctor González Cortés, colaboradores de la FPMC, en el número 34 de la revista científica Teoría y Praxis (RTP), editada por la División Multidisciplinaria Cozumel de la Universidad Autónoma del Estado de Quintana Roo (UQROO).
La documentación representa un aporte significativo al conocimiento regional y abre la puerta a futuras investigaciones sobre este tipo de condiciones.
Este hallazgo confirma que el trabajo sostenido de la FPMC junto a la comunidad está dando resultados, al generar información científica que servirá de referencia para posteriores observaciones.
Asimismo, se espera que motive a más personas a reportar sus avistamientos, fortaleciendo la participación ciudadana y el monitoreo de la biodiversidad insular.
La directora general de la FPMC, Juanita Alonso Marrufo, destacó que este tipo de registros reafirman el compromiso de la institución con el Nuevo Acuerdo por el Bienestar y Desarrollo de Quintana Roo, impulsado por la gobernadora Mara Lezama, al vincular la investigación científica, la educación ambiental y la participación social.
“Cuidar nuestro entorno natural es una responsabilidad compartida. Cada niña, niño, joven o adulto que se suma a la observación de aves o a cualquier programa ambiental contribuye a construir una comunidad más consciente, unida y comprometida con el futuro de nuestro estado”, expresó.



