Cancún, Quintana Roo. 13 de marzo de 2020.
Buenas tardes. ¿Se oye?
Buenas tardes, con el gusto de saludarles me da mucho gusto poder estar en este Segundo Informe de Actividades de la Comisión de los Derechos Humanos del Estado de Quintana Roo, tener la oportunidad de escuchar al maestro Toh Euán siempre es muy importante, a mí me da mucho gusto que él esté a cargo de esta comisión.
El maestro casi doctor, ¿Cuánto falta? Bueno entonces no tan casi. Pues es un hombre, una persona de carrera, trabajando en la Comisión con más de 16 años de experiencia desde visitador hasta presidente y eso sin duda le da mucha fortaleza a la comisión.
Me da mucho gusto saludar a la diputada Judith Rodríguez, a la presidenta municipal de Benito Juárez Mara Lezama, por supuesto al maestro Marco Antonio Toh, a mi esposa Gaby, a los presidentes municipales de Othón P. Blanco, Solidaridad e Isla Mujeres, gusto saludarles.
A don Fernando Chávez diputado también de la Décima Sexta Legislatura del Congreso del Estado, gracias por recibir señor Rector aquí en la universidad, está muy bonita, muy bien, muchas gracias.
Al licenciado Juan Antonio Renego Dorantes presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Campeche, al maestro Miguel Oscar Sabido Santana presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Yucatán, bienvenidos me da mucho gusto saludarles, al consejo consultivo de la comisión de Derechos Humanos del Estado, compañeros del gabinete, autoridades estatales, municipales, magistrados, magistrada, saludarles, organizaciones no gubernamentales amigos de los medios de comunicación.
Les decía que es un gusto estar con ustedes y acompañar al maestro Marco Antonio Toh Euan es su segundo informe de actividades al frente de la comisión de Derechos Humanos del Estado.
El hablar de Derechos Humanos conlleva a tomar como punto de partida a la persona, desde la concepción misma.
La historia nos ha dado duras lecciones del abuso entre seres humanos y parte de la evolución de toda sociedad, es precisamente reivindicar la Dignidad Humana como derecho fundamental.
Cada capítulo de la evolución social de los pueblos, va marcando avances significativos en la defensa y procuración de los derechos humanos y los tiempos actuales nos exigen un mayor respeto a ellos, pero sobre todo una mayor vigilancia y procuración.
No existe nada más importante que el respeto a los derechos humanos como esencia de la humanidad, como el sello de identidad que nos distingue o nos condena.
La Declaración Universal de Derechos Humanos ha significado los valores básicos, la dignidad humana inherente, la no discriminación, la igualdad, la equidad y la universalidad para todos, en todo lugar y en todo momento.
Un elemento esencial de la protección de los derechos humanos es la difusión amplia de los conocimientos y el fomento de la comprensión entre las poblaciones de cuáles son sus derechos y cómo pueden defenderlos.
Yo felicito el trabajo que está haciendo el maestro Toh en nuestro estado.
Desde hace mucho tiempo vive en mí la vocación de serle útil a los quintanarroenses, pero por algún tiempo en que fue relegada, lo que me obligó a estar siempre trabajando y atento ante cualquier violación del respeto hacia todo derecho humano que se hizo de alguna manera cotidiano en algunos comportamientos.
La lucha política con el objetivo de ponerle fin a ese tiempo autoritario, uno de mis primeros compromisos frente a la gente fue el de respeto y de no hacer daño. Hoy esas palabras siguen teniendo un sentido especial para mí.
El principio de no hacer daño se aplica tanto a la responsabilidad del liderazgo político como en toda la disciplina profesional.
El respeto a los derechos humanos tiene muchas caras y hay que verlo en su etapa integral. Su violación no está solo en una agresión física o moral. Está en nosotros brindar las condiciones básicas para que todo ciudadano viva en libertad y viva mejor.
La violación de los derechos humanos va desde la falta de educación, de salud, de una vivienda digna, así como cualquier otra forma de rezago, desarrollo y de bienestar.
Por eso ese es nuestro compromiso el deseo de hacer desde nuestra trinchera cada vez más por mejorar las condiciones de vida, en todo sentido, de nuestra comunidad. No podemos perder de vista la relación entre la política y la persona.
Una sociedad saludable se apoya en los principios de igualdad y de justicia, un buen liderazgo se basa en la búsqueda de los derechos humanos y de la dignidad humana para todos, donde el gobierno obtiene su justo poder del consentimiento de las personas a las que gobierna.
Esto me lleva a que hay que escuchar a las personas.
Como gobernador de Quintana Roo, me preocupa y me ocupa, el contribuir en el respeto de los Derechos Humanos, porque servir a la gente con un trato digno, con un trato humano, es una premisa no negociable en mi administración.
Felicito al maestro Toh por este segundo informe. Hay mucho aun por hacer y no hay tiempo de espera. Hay que trabajar todos los días para lograrlo.
Muchas Gracias.