Tihosuco, Felipe Carrillo Puerto, Q. Roo., 26 de julio 2019.
Buen día, me da mucho gusto saludarles, con mucho gusto de estar aquí en Tihosuco, en Felipe Carrillo Puerto, tener la oportunidad de saludarles, de participar en este muy importante evento de identidad quintanarroense, de identidad de nuestra cultura maya que bien vale la pena recordar, que bien vale la pena celebrar y que bien vale la pena también traer de la historia esa enseñanza para lo que viene, para el presente, para el futuro de nuestra cultura maya y sobre todo de nuestro estado.
Me da gusto saludar al señor presidente municipal de Felipe Carrillo Puerto a don José Esquivel, agradecerle su anfitrionía aquí en el municipio, gracias Pepe.
Salud también al señor diputado Luis Ernesto Mis Balam, saludo al señor presidente municipal de Lázaro Cárdenas, don Josué Nivardo Mena y me da mucho gusto compartir con él este momento a don Higinio Cahuich Pat descendiente de don Jacinto Pat, un hombre con toda la historia encima y que la conoce, la ha vivido y que sin duda representa mucho para lo que hoy precisamente estamos conmemorando, un gusto saludar a don Higinio.
Saludo a don Hernán Lara Zavala, escritor, autor de la novela histórica “Península Península”, bienvenida también señora esposa doña Ilda Lara. Y saludar a don Simón Camal Poot presidente del Gran Consejo Maya, a Gabino Cruz General Maya del Centro Ceremonial de Chanka Veracruz, a Delta directora del INMAYA.
Saludo también al señor diputado don Luis Alegre, diputado federal por Quintana Roo, me da mucho gusto saludar a don Daniel Pech Tuz, alcalde de Tihosuco gracias por recibirnos aquí la alcaldía, saludo a don Edgar Luis Cab delegado de la comunidad de Tepich, saludo al señor delegado del INAH, gusto saludarte Margarito encantado de verte, a los funcionarios estatales, municipales, representantes de los distintos centros ceremoniales, amigos de los medios de comunicación, señoras y señores:
Les decía que es un gran gusto estar aquí en Felipe Carillo Puerto, en Tihosuco, en esta ceremonia del 172 aniversario de la Guerra Social Maya, un hecho que es fundamental en la historia de nuestro estado, de nuestra de tierra, que llevó a nuestros hermanos mayas de las regiones del sur y oriente de Yucatán a sublevarse al dominio de los mestizos y criollos, frente a la dominación colonial que padecieron durante varios siglos.
En aquellos tiempos los indígenas eran sometidos por la vía del adeudo. Un indígena nacía y moría en el mismo lugar; que era la hacienda donde trabajaba durante largas jornadas, recibía un pago arbitrario establecido por el propio hacendado, que se realizaba a través de la tienda de raya, propiedad también del mismo hacendado. Era obligado a adquirir alimentos y suministros a los precios que ellos decían. Estas causas, entre otras, originaron que el descontento entre las comunidades entonces tomó forma e inició este movimiento social por su identidad, libertad y a recuperar su tierra.
La revuelta empezó el 30 de julio 1847 en el poblado de Tepich, aquí muy cerquita y duró más de 55 años en los que destacaron líderes como Cecilio Chí y Jacinto Pat, Manuel Antonio Ay que ya escuchamos hace un momento. Durante esos años los mayas lograron tomar la mayor parte de la península y obligaron al gobierno a solicitar apoyo militar al gobierno mexicano. El saldo fue una cruel guerra en el que el 50% de la población maya perdió la vida, la industria azucarera desapareció y muchos pueblos quedaron destruidos.
La guerra fue una respuesta ante la situación de pobreza, la desigualdad social entre otros, causada por el reparto de tierras y la opresión ejercida por la población blanca.
Estoy seguro que esta nueva generación de quintanarroenses también hemos tenido algún tipo de guerra social, nuestra propia respuesta ante la situación de pobreza, desigualdad social y el reparto de tierras y la opresión ejercida por una minoría gobernante que nos antecedió. Anarquía, rezago, división social, degradación, decadencia moral, también fueron en esos tiempos las voces comunes que limitaron la perspectiva administrativa, nuestra ciudadanía puso un alto y por eso a través del voto logro un cambio.
Por eso, uno de los puntos básicos desde que llegamos al gobierno fue establecer un periodo de reconstrucción, orden y reconciliación que le permitiera a Quintana Roo y a los quintanarroenses recuperar su liderazgo en toda la grandeza que poseemos. Abandonar por completo, esos primeros lugares en índices negativos que jamás imaginamos.
Por lo mismo, llevamos ya tres años en esa etapa de reconstrucción, trabajando con soluciones concretas a fin de combatir los flagelos que encontramos en todos los ámbitos y que fueron también muy fuertes para dividir a la sociedad. Hemos logrado una inclusión social, la seguridad que entregaron a grupos delictivos y la credibilidad institucional que se vio rebasado.
Este 172 aniversario, nos convoca a recordar a nuestros ancestros libertarios mayas con el sentimiento de sus tiempos y el ejemplo de construir juntos, en este nuestro tiempo, el camino hacia el progreso, hacia una mejor educación, hacia una mejor salud, hacia una mejor vivienda, hacia las necesidades de la vida moderna, en torno al pleno desarrollo y al trabajo productivo.
Hemos iniciado una serie de programas que buscan dignificar los poblados de la toda la zona maya de Quintana Roo, tenemos que tener un estado incluyente, respetando las raíces y tradiciones, respetando la lengua de nuestros orígenes y las costumbres que nos dan el sentido a lo que somos el día de hoy.
No podemos en esta reconstrucción, tener un estado de primera y otro de segunda. No podemos tener tampoco ciudadanos de primera y ciudadanos de segunda. Es así que, en el marco histórico de esta celebración, reconocemos el sacrificio de los caudillos que llevaron en alto el nombre de sus ancestros y que hoy permite que la cultura maya siga viva.
Mi homenaje y respeto por los derechos indígenas y el revivir cada tradición y cultura, representa la mejor enseñanza para que nuestras futuras generaciones tengan más y mejores oportunidades para todos.
Muchas gracias y hay que seguir con esta celebración en bien de lograr mejores condiciones de vida para todos nuestros hermanos mayas, para todas nuestras poblaciones de la zona maya y sobre todo para enaltecer y fortalecer a toda nuestra cultura maya.
Muchas felicidades, muchas gracias.
